jueves, 25 de noviembre de 2021

Èze

Aprovechando un viaje hacia Mónaco, y siguiendo las recomendaciones de varios amigos, nos detuvimos en la pequeña localidad de Èze, situada entre Niza y el propio Mónaco.

Tras dejar el coche en el parking situado junto a la carretera, subimos a pie al pequeño y antiguo casco urbano. Antes de llegar nos encontramos con la entrada a unos magníficos jardines adornados con esculturas de animales. Supongo que por las fechas en las que estábamos, estaba cerrado pero pudimos verlo desde la parte alta del pueblo.

Se accede al casco urbano a través de una magnífica puerta fortificada del siglo XIV. Dejamos a un lado la iglesia de Nuestra Señora de la Asunción (Notre Dame de l´Assomption) y nos adentramos por las preciosas y estrechas callejuelas del pueblo, todas profusamente adornadas con flores. Creo que no llegamos a ver ni una sola casa de construcción más o menos actual, por lo que te puedes imaginar la vida en el lugar hace muuuuuchos años. Bien es cierto que algunas de las casas han sido adquiridas por un hotel (La Chèvre d´Or) que las alquila como habitaciones del mismo.

Llegando a la parte alta, se llega a una zona de pago, a través de la cual se accede a un espléndido jardín exótico con cactus de todo tipo, todo ello con unas vistas impagables de la Costa Azul francesa, sobre la que está colgada la villa. Me gustaron especialmente las esculturas de mujeres que se encuentran en diversos puntos del jardín.

Situadas en la parte más alta se encuentran las ruinas de un castillo, que nos permite disfrutar de unas vistas de 360 grados tanto hacia la costa como hacia el interior.

Vista del pueblo

Plano general

Puerta de acceso
Iglesia de Ntra. Sra. de la Asunción
















Jardín que permanecía cerrado


Recepción del hotel La Chèvre d`Or



Vista del pueblo desde el jardín exótico
Vistas del pueblo y de la Costa Azu. Al fondo, Villefranche y Niza







Ruinas del castillo

Aprovechando la proximidad, nos acercamos también a Niza, disfrutando de un agradable paseo por el paseo marítimo desde el puerto, donde aparcamos,  hasta el casco viejo, adentrándonos en sus callejuelas y el estupendo ambiente que había por todos lados

Puerto deportivo





Monumento a los caídos en la 1ª guerra mundial

Palacio Rusca

Palacio de Justicia

Plaza Masséna

Fuente del Sol

La Ópera

Iglesia de San Francisco de Paul

Mercado de las flores y, al fondo, el Palacio de la Prefectura

Capilla de la Misericordia

Iglesia de Santiago el Mayor (Saint Jacques le majeur)

Catedral de Santa María y Santa Reparata